Parió a su hija y envuelta en la placenta la abandonó en un parque bajo las sombras nocturnas.
La bebé fue encontrada por dos jóvenes que caminaban por el parque Sucre, en Colón, quienes la llevaron al Hospital Manuel Amador Guerrero.
Las enfermeras de la Sala de Neonatología la bautizaron como Angid De Gracia.
"Ésta bebé llegó en brazos de una joven al Cuarto de urgencias todavía con la placenta pegada a su piel; el doctor Ricardo Blakwood la atendió, ya que todavía tenía el cordón umbilical, luego fue ingresada a la sala", dijo Publio De Gracia, subdirector médico del HMAG.
De Gracia dijo que se desconoce qué tiempo estuvo la niña expuesta al frío, pero lo importante es que se le dieron las atenciones inmediatas para evitar que le ocurra algo.
La Sala de Neonatología ha centrado su atención en la nueva huésped que en la mañana de ayer, martes, tomó sus primeros sorbitos de leche.
Kennet Williams, encargado de la Sala de Neonatología, explicó que la recién nacida pesa 2.61 kilos, lo que es adecuado, pero el parto no fue adecuado lo que provoca una condición delicada para la pequeñita.
Dijo que hay que estar pendiente de la hemoglobina y determinar si hay cuadro infeccioso.
Adelantó que la bebé es de raza negra.
Roda Ceballos, enfermera, es madre de una niña y ese hecho la molestó como mujer. Sin embargo, con mucha alegría la enfermera informó que en la mañana, casi después de 12 horas de permanecer en la sala de niños, le quitaron el oxígeno a la pequeña Angid que está demostrando fuerzas y deseos de vivir.