Cuba no tiene ningún interés político en que Luis Posada Carriles y sus colaboradores Gaspar Jiménez, Guillermo Novo y Pedro Remón retornen a su país de origen y que enfrenten la justicia por los actos de terrorismo en contra de ciertos funcionarios del gobierno cubano, incluyendo al ex presidente de esa nación, Fidel Castro, aseguró ayer en Panamá, Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
"No sabemos de dónde salen esas informaciones, ya que nuestro interés es que ese señor y sus colaboradores paguen su deuda con la justicia venezolana y la panameña, quienes los han juzgado por los delitos de terrorismo", resaltó Alarcón.
Lo que sí desea Alarcón es que se cumpla con la justicia y si en Panamá, se ha declarado como "inconstitucional" el decreto que indultó en el 2004 a Posada Carriles y sus allegados, lo importante es que cumpla con lo establecido en los sistemas penales de cada uno de los países y de ser posible, se logre su extradición para que enfrente los cargos que se le han formulado de terrorismo.
De igual manera, Alarcón destacó que en Venezuela, Posada Carriles enfrenta otro cargo de terrorismo, incluso, se escapó de la cárcel donde cumplía su pena.
Con cierta sorpresa, el parlamentario dijo que los norteamericanos protegen a Posada Carriles y sus compinches, quienes han sido juzgados como terroristas, pero les niegan la solicitud que por años han venido formulando a los gobernantes estadounidenses de que les entreguen a cinco ciudadanos cubanos que tienen detenidos, por el simple hecho de combatir el terrorismo.