Iván Ibarra es un niño talentoso y aprovecha su tiempo. Para él los trabajos de la escuela son importantes porque le ayudan a aumentar sus conocimientos y sobre todo, su creatividad es mucho mejor.
Él es apasionado de los dibujos y la pintura y qué mejor manera de expresarlo que a través de pinturas sobre tejas que él mismo confeccionó para llevar a la escuela.
Este niño está en sexto grado en la escuela Simeón Conte de Penonomé y asegura que la idea de la maestra de pedirles pinturas en teja fue la mejor porque esta es una de sus especialidades y más porque se inspira en la naturaleza.
No utiliza grandes técnicas, sólo dibuja, luego con una tempera, pinta, deja secar y luego barniza.
Este niño indica que si fuera posible y alguien se interesa por sus tejas, él podría seguir pintando más, porque le encanta y allí expone todo lo que un niño piensa y siente, porque la pintura y el dibujo es lo que el ser humano siente.
Iván también dibuja en hojas y ha logrado aplausos de sus maestros, y admiración de sus compañeros.
Algunas personas le han encargado dibujos para adornar sus casas, ya que son muy hermosos y únicos.
El niño anhela ser un pintor y cuando crezca, quiere estudiar arte, ya que es lo que más lo apasiona y le inspira a seguir adelante luchando, debido a que anhela hacer su sueño realidad.