El júbilo generado por la ley que desde el pasado jueves permite en España la unión legal entre homosexuales marcó ayer en Madrid la celebración festiva de la tradicional Marcha del Orgullo Gay.
Cientos de miles de personas, según los organizadores, y 97.000 según la policía desfilaron por el centro de la capital con un calor sofocante. La marcha multitudinaria, a la que se sumó la ministra de Cultura, Carmen Calvo, transcurrió en un ambiente festivo.