Comienzan los octavos. Es la puerta de los choques directos, donde no hay mañana. Se guarda la calculadora, se entra a los tiempos de alargue y a la definición por penales.
El sábado se enfrentan Uruguay y Corea del Sur, y los Estados Unidos frente a Ghana. En papeles, los equipos de América deben pasar. Uruguay debe manejar mejor la pelota. Debe hilvanar más pases seguidos y de seguro verá reflejado eso en el marcador. Tiene dos goleadores temibles: Forlán y Suárez.
USA, deberá aprovechar cada ocasión que se le presente. Los africanos saben tocar muy bien la pelota. Tienen con que amargarle el mundial a los gringos.
El domingo hay choques interesantes Argentina y México. Los mexicanos se saben inferiores a los argentinos, que llegan con puntaje perfecto y con un Messi hambriento de gol. Dicen los expertos que es la etapa donde aparecerá el goleador del Barcelona. Veremos, los mexicanos no quieren ser ovejas en el matadero.
Alemania contra Inglaterra. Es el choque de los octavos. Una Alemania muy joven y una Inglaterra curtida, ambos deben esgrimir a la tradición para tratar de conseguir la victoria y pasar a cuartos de final.
El lunes ya tiene dos partidos. Holanda contra Eslovaquia. Los holandeses son unos señoritos en el cuadro, Van der Vaart, Huntelaar, Robben, Van Persie, Senyjder. Acumularon 9 puntos. Algo me gustó que cuando Camerún los sofocó sacaron las casta y metieron el gol del gane, Un equipo joven y ambicioso. Ojo que Eslovaquia eliminó a Italia.
Por su parte Japón, el segundo equipo asiático entre los mejores 16 del mundial, se enfrenta al Paraguay, primero en su grupo. Un choque natural entre el fútbol de dos continentes, veremos que pasa.
Falta el cruce de los grupos G y H. Brasil, clasificado se enfrenta a Portugal, que se apoya en sus 7 goles a favor. Ambos lucharán por pasar primero para recorrer un camino más fácil. No saben a quién enfrentar, pues todavía nadie sabe si España, Suiza y Chile clasificarán.