Hoy celebramos a nivel mundial el Día de los Océanos, por lo que conversamos con Magdalena Velásquez, de Mar Viva, acerca de los esfuerzos que se realizan en Panamá para la conservación de este recurso.
Actualmente Mar Viva lleva a cabo la campaña para la conservación del Tiburón; un programa a nivel regional que inició el 10 de abril en Panamá, con la finalidad de que las personas tomen conciencia de la necesidad de los tiburones, para la buena salud de los océanos. Resulta que los tiburones son los carroñeros de los mares y se encargan de devorar a los animalitos enfermos y débiles.
La campaña dura dos meses, y trata de que las personas interesadas en evitar la pesca de juveniles (tiburones sin desarrollar) o madres en gestación, firmen la petición a través de www.marviva.net
tiburon o llamar al 208-9444, que será entregada al Presidente de la República.
"Debemos cambiar la mala imagen que se tiene del tiburón gracias a la película. No es el depredador, sino que es súper importante, pues todos los animales del mar evolucionan según las características que desarrolla el tiburón", afirma Velásquez.
Este animal que ha sobrevivido a cuatro extinciones masivas se enfrenta a otro enemigo, el aleteo.
Esta práctica se basa en cortarle las aletas a la especie y desechar el cuerpo del animal al mar. Los especialistas aclaran que no es aleteo cuando se extraen las aletas y el cuerpo se consume. "Lo que Mar Viva se opone es a no utilizar todo el recurso, pues hay muchas personas que se mueren de hambre en el mundo y la gente está botando la comida al mar", afirma.
Otras formas de proteger el mar, de donde surge el 80% del oxígeno que respiramos, es a través del patrullaje, específicamente en el área de Parque Nacional Coiba, en conjunto con la ANAM, mediante embarcaciones que evita la pesca ilegal. Además, la campaña ha visitado Panamá, Chitré y Bocas del Toro y en los pueblos que rodean el Parque: Coiba como Malena, Remedio, Icaco y Montijo, donde se brindan charlas a los pescadores artesanales, explicándoles las tallas de los animales que se pueden pescar para proteger este recurso a las futuras generaciones.
ESTAS SON LAS PETICIONES:
- Restaurar la Comisión de Pesca Responsable, para apoyo de la Autoridad de los Recursos Acuáticos (ARAP), en la toma de medidas de control y uso sostenible del recurso pesquero.
- Cumplir el mandato de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) de desarrollar y aprobar el Plan de Acción Nacional de tiburones.
- Reforzar el presupuesto de la ARAP, dirigido a aumentar el número de inspectores y técnicos debidamente capacitados y así poder aplicar de una manera más efectiva la Legislación Nacional.
- Establecer vedas temporales por áreas según el ciclo de vida del tiburón, para evitar la pesca de juveniles y madres en gestación, que es uno de los mayores problemas.
- Aprobar la reglamentación del la Ley No. 9 de 2006 que prohibe el aleteo del tiburón en las aguas jurisdiccionales de la República de Panamá.
- Implementar actividades de control y vigilancia en las Zonas Especiales de Manejo del país, que son reservas marinas que contribuyen a repoblar con vida nuestros mares.
- Instaurar un sistema de denuncia ciudadana efectivo en la ARAP, para reportar las infracciones a la legislación vigente.
- Permitir el acceso expedito de funcionarios de la ARAP a los puertos privados donde exista sospecha de pesca ilegal.
- Presentar y discutir en la Asamblea Nacional el Anteproyecto de Ley General de Pesca, Acuicultura y Recursos Marino-Costeros, por la cual se regula la pesquería y las actividades conexas en la República de Panamá, (la Ley vigente data de 1959 y resulta inadecuada).
- Que la ARAP y el Ministerio de Economía y Finanzas mejoren el sistema de recopilación de las estadísticas pesqueras del país, que permita conocer con certeza cuánto se está extrayendo y exportando, no solo en tiburones, sino en otras especies, lo que permitirá a las autoridades pesqueras realizar una administración efectiva y sostenible de los recursos marinos.
- Implementar un ordenamiento de la pesca artesanal que incluya controles, como permiso de zarpe, uso de puertos establecidos y un registro permanente de embarcaciones artesanales.