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NUEVAS BARRIADAS EN PANAMA OESTE
Negocio para los antisociales
Eric Montenegro
Panamá Oeste - EPASA
Las viviendas construidas en barriadas por parte de promotoras, están siendo la opción preferida de los antisociales para cometer hurtos. Las técnicas están variando y van desde dormir a los propietarios con gases que rocían por las ventanas, hasta aprovechar su ausencia para mudarlos por completo, muchas veces ante los ojos de los vecinos que dan la dirección que buscan los supuestos miembros de una empresa de mudanza. La mayor parte de estas barriadas al realizar sus promociones de venta resaltan el aspecto de la seguridad, lo que va acompañado de una garita y el cercado total del área residencial, lastimosamente pocas son las que cumplen a cabalidad estos dos aspectos; lo que redunda en beneficio de los antisociales. Para los residentes de Villas del Campo el problema está asumiendo niveles preocupantes. El mes pasado una vivienda fue robada en tres oportunidades, lo que ha motivado a sus propietarios a prácticamente a convertir sus viviendas en cárceles, algo que para ellos mismos esta alejado de la casa que una vez añoraron tener. A criterio de Betzi de Ortega, residente del área, la empresa no les ha cumplido en cuanto a materia de seguridad; el panfleto promocional decía que se trataba de una urbanización segura y con garita de vigilancia, lo cual a los dos meses de haberse mudado no ha sido verdad, prueba de ello son los tres robos que han sufrido. Agrega que actualmente viven encerrados, lo que es preocupante pues están pagando por algo que no se les está cumpliendo y que a pesar de haber solicitado a la promotora el cumplimiento de las promesas, solo se recibe por respuesta que cada quien debe cuidar lo suyo. Enfatizó la señora Ortega, que de nada sirve cercar las viviendas o pagar un guardia que permanezca en la garita, si la empresa no ha construido la cerca perimetral lo que permite la entrada de los antisociales por cualquier punto. Por su parte Guillermo Sanjur, explica que ya tiene dos años de estar viviendo en el residencial Villas del Campo y cuando compró recibió la promesa que se procedería a cercar toda la barriada y se mantendría un guardia se seguridad hasta el día en que se vendiera la ultima casa. Ello tampoco ha sido cumplido puesto que aún se está en la etapa de construcción de un número plural de viviendas. No obstante, reconoce que la empresa advirtió que luego de finalizada la etapa de construcción, los residentes deberían costear el pago del guardia se seguridad. Sanjur sostiene que los robos se suscitan a cualquier hora del día; el mismo ha sido víctima en dos ocasiones de robos a su residencia, en los cuales prácticamente lo han mudado. Para Elizabeth Martínez, la situación no varia; ella dijo haber conversado y enviado notas a la promotora, solicitando la construcción de la cerca, pero no se ha recibido otro tipo de respuesta sino que el cercado de la barriada no esta dentro de sus proyecciones. Al respecto, se buscó la opinión de la empresa y según el ingeniero residente Geovany Calcaña, en lo que respecta a las fallas estructurales en las viviendas, siempre los problemas son atendidos, alegando que "los residentes tiene su opinión y la empresa la suya". Dijo no saber si la empresa en algún momento se comprometió a construir la cerca perimetral, ya que ese tipo de información no la maneja, alegando que en materia de seguridad los actuales residentes deberían recolectar una cuota por casa para el pago del guardia de seguridad. El Ing. Calcaña, advierte que son los dueños del proyecto quienes deben dar respuesta a las demandas de los habitantes del proyecto, pues él únicamente transmite las inquietudes.
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