Las relaciones entre la Iglesia y el Estado en Venezuela y Bolivia "están tensas", mientras que en Cuba "amaina la tempestad de hace unos cuantos años", declararon ayer el portavoz del CELAM, Héctor Gutiérrez, y el obispo cubano Emilio Aranguren.
Monseñor Gutiérrez dijo que, aunque en la XXXII asamblea plenaria del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), que se celebró esta semana en Managua, no se abordaron las relaciones entre la Iglesia y el Estado como asunto central, que fueron las misiones, sí se conocieron informes sobre Bolivia y Venezuela.
Explicó que los episcopados de Venezuela y Bolivia presentaron informes sobre las situaciones "difíciles" entre la Iglesia y los Gobiernos de ambos países.
La fuente señaló que en esos informes los obispos de Venezuela y Bolivia no abundaron en detalles pero sí "se manifestó que se están viviendo momentos difíciles y tensos" en esos países.
En cuanto a Cuba, el obispo de la diócesis cubana de Holguín, Emilio Aranguren, señaló que "se está amainando la tempestad de hace unos cuantos años y que (en la isla) las cosas empezaron a cambiar" con respecto a la Iglesia católica.