Como una trampa de muerte, así califican transeúntes y conductores panameños y extranjeros la centenaria estructura del puente sobre el río Sixaola, límite natural entre Panamá y Costa Rica.
Este es el paso obligado de cientos de trabajadores, estudiantes, turistas y transportistas que a diario transitan desde Guabito (en Panamá) hacia Costa Rica.
Marvin Duarte, conductor de equipo pesado, fue enfático al decir que a ambos países les debería dar vergüenza tener todavía un puente tan deteriorado y peligroso.
Iván de Icaza, viceministro de Obras Públicas, aseguró que ya se tiene el diseño del nuevo puente que se construirá con fondos binacionales a un costo de 16 millones de dólares.
"Primero se construirá provisionalmente un puente Bailey, y el próximo año se iniciará la construcción de otro permanente de concreto de 17 metros de ancho, doble vía y con aceras a ambos lados".