INQUIETUDES
A la expectativa
Antonio Díaz
Crítica en Línea
Desde hace una semana tenemos
nuevo Gobierno, el que contra todos los pronósticos de las benditas
encuestas emergió como ganadora la figura de Mireya Moscoso. La Presidenta
tendrá que afrontar un reto y el más importante es la reversión
del Canal, tarea que debe reunir a todos los panameños preparados
para manejar las áreas revertidas.
La señora Moscoso se ha manejado con pasos cautelosos y ha llamado
a la unidad nacional, cosa que en principio rechazó el PRD, lo cual
me parece un error porque la partidocracia no debe interferir con los asuntos
nacionales. Hay otros dirigentes con partidos de poca monta que han querido
exigir al nuevo Gobierno una serie de prebendas, cuando no tienen representación
masiva ni significación para ello.
Le queda un tiempo prudencial a doña Mireya para nombrar sus comisiones
de trabajo, ya que debe estar libre de presión para cuando tome posesión
de su nuevo cargo. Asimismo, la nueva Presidenta debe sacudirse los aduladores
y serviles que son la maldición y perdición de los buenos
dirigentes y que ahora empiezan a aparecer en el panorama Arnulfista.
No se trata pues, de nada fácil. El Embajador de Panamá
en los Estados Unidos ha advertido la actitud de grupos reaccionarios en
contra de nuestro país y conociendo la política de los gringos
todo cabe en lo posible. Con los gringos no hay que dejar de crecer porque
tienen una política impredecible y así lo han demostrado a
través de la historia. Lo que dijo el Embajador Alfaro hay que tomarlo
en cuenta. No hay que olvidar los años cuando se derrocó al
Presidente Salvador Allende en Chile y las consecuencias catastróficas
de haber desafiado las garras del poder. La historia negra de las intervenciones
armadas y diplomáticas de los Estados Unidos contra los países
del sur del Río Bravo es una prueba fehaciente de ello.
Queremos sentirnos optimistas de que las cosas se harán como es
debido con el nuevo Gobierno. Sin embargo, abrimos un compás de espera
para que se fortalezca la situación en Darién, libre de incursiones
de guerrilleros y bandoleros, y que se defina de una vez por todas los intentos
de establecer en Panamá el CMA, que yo no creo que sea capítulo
cerrado como dice el anterior y el nuevo Gobierno. A los norteamericanos
les apetece nuestra posición geográfica y van a inventar cualquier
pretexto para quedarse en el istmo. Unos de ellos, será la falta
de un ejército para custodiar el Canal y vean que se lo estamos advirtiendo
con mucha anticipación, porque así está consignado
en los Tratados Torrijos-Carter.
De repente, ahora hay miembros que están en la Junta Directiva
del Canal que jamás protestaron contra los vejámenes a la
soberanía panameña pero que ocupan elevadas posiciones en
el engranaje de las aréas revertidas. Como dijimos una vez, no son
todos los que están ni están todos los que son. Gente fugitiva
de la gloria las han reemplazado por voces que fueron antinacionalistas
o que estuvieron al margen de la lucha patriótica aprovechándose
de los frutos de una gesta a las cuales nunca le dieron apoyo. En este país
que es muy chico, todos saben quién es quién y se respeta
la verdad más auténtica.
Los nombres de los auténticos héroes de la lucha nacionalista
pertenecen a un alpinismo generacional que no se puede ocultar. Están
ahí. Son transparentes y el aparente olvido no podrá borrar
sus jornadas heroicas. Pretendemos que el nuevo Gobierno le dé el
valor a todos aquellos ciudadanos anónimos que ayudaron a forjar
esta nación. Esos panameños que esgrimían "que
soberanía no se come" tendrán que rendirse ante las evidencias
de la historia. Pero no duden que estos serán los oportunistas y
que reclamen puestos en la administración del Canal basados en convenios
políticos, aunque sin merecerlos.
Estamos pues, a la expectativa de un nuevo Gobierno. Le deseamos la mejor
de las suerte a doña Mireya, pero le advertimos que sea precavida.
A la hora del destino se impone el rescate de los verdaderos valores ciudadanos.
No debemos fallarles a los ilustres patricios ni a la masa irredenta. Que
con su patriotismo forjaron esta nación.

|