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Joao Santos, profesor y orientador especializado en dominio mental.  |
Los ojos son el reflejo del alma, por lo que nuestros sentimientos se ven plasmados en ellos como una pintura. Este es el pensar de muchas personas que aseguran que hay miradas que matan y le atribuyen a esta fuerza el nombre de mal de ojo.
Las historias de mal de ojo tienen orígenes ancestrales. En escritos antiguos, como el de Plinio en su libro Historia Natural, VII,: "Isigono y Ninfodoro se enuncia, que en ciertas zonas de Africa observaron a personas que tenían esta facultad. "Entre los triballis y los illyris, embrujan con una mirada con la que matan a aquellos que miran fijamente durante un largo rato, especialmente con una mirada cargada de ira; su mal de ojo es sentido con más fuerza por los adultos y lo que llama más la atención es que tienen dos pupilas en cada ojo", relató.
Tanto inquisidores católicos como protestantes dieron muerte ha muchas personas acusadas de lanzar estas contemplaciones. Un dato curioso es el obtenido en el proceso de las brujas de Salem, donde se habla del caso de una señora apellidada Bishop, que fue acusada de observar de tal modo a las muchachas del lugar que se desplomaban inmediatamente, ante lo negro de su mirada.
En nuestro país también se dan casos de los famosos "ojeados". Ignacio J. Valdés, en sus libro Cuentos de la Ciudad y el Campo, dedica una de sus historias al mal de ojo.
¿MITO O REALIDAD?
Todas estas manifestaciones están tejidas con la madeja de la leyenda, pero, en realidad ¿Qué es el mal de ojo? Según el profesor y orientador especializado en dominio mental, Joao Santos, el mal de ojo es una enfermedad de energía transmitida por un pensamiento negativo directo o indirecto.
Señaló que hay personas que tienen una fuerza energética tan grande, tan negativa que con sólo ver a una persona pueden afectar su aura, su contorno, su ser.
Consideró que prácticamente es una irradiación de envidia que se trasmite por medio de ondas vibratorias negativas que afectan el aura. Afirmó que este padecimiento desestabiliza corporal y mentalmente al afectado produciéndole fiebres, soltura y una racha de energía bastante negativa. Recalcó que el mal de ojo no es exclusivo de los niños, porqué desde el bebé, hasta el más anciano puede ser atacado por el problema.
Indicó que los más propensos a ser perjudicados por esta enfermedad energética son las personas débiles en salud, bajas en vitaminas, los que no tienen mucha seguridad, pero aclaró que los más afectados son los bebés.
COMO CONTRARRESTARLO
Santos aclaró que se puede contrarrestar a esta fuerza síquica con baños con rudas y de orine. Otro método es colocarle al afectado una prenda íntima del autor de la mirada funesta, para que se invierta el mal de ojo. Esto se logra por medio de la absorción en la ropa de esa energía y así pueda sudar y descargar.
En caso de no conocer a quien causó el daño, debe buscarse la ropa que cargaba la persona que recibió el mal de ojo y destruirla mientras se le reza unas oraciones. "Se toma a la persona y se reza, mientras se le va rezando se le va destruyendo o rompiendo toda la ropa que tenía puesta en ese momento, es un rompimiento, se destruye y se quita y se quema", sentenció. Aceptó que este tratamiento es un poco costoso, pero que a su vez es más efectivo.
Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación, es un proverbio árabe que ilustra el pensamiento de quienes creen en la existencia de esta fuerza, que muestra el poder de la envidia, el egoísmo y el poder mental. |