En un mes, el caso del sacerdote Hermógenes Ovalle, quien supuestamente embarazó a una menor de 16 años, irá a los tribunales, en tanto, se está a la espera de los dictámenes psicológicos y psiquiátricos que se le practicaron al cura.
Argentina Barrera, fiscal superior de Coclé y Veraguas, informó que este proceso lo está instruyendo la fiscal del Segundo Circuito de Coclé, Gladys Morán. Se está a la espera de los dictámenes psicológicos y psiquiátricos del imputado y de la víctima, añadió.
Hace algunas semanas los padres de una menor de 16 años, denunciaron ante la Policía Técnica Judicial y luego ante la Fiscalía, el acoso sexual y violación en contra de su hija por parte del sacerdote de la Parroquia de Río Hato, Hermógenes Ovalle.
Según se conoció, la menor fue obligada por el sacerdote a que abortara la criatura, pero ésta no accedió, ya que fue aconsejada de sus padres y vecinos.
El sacerdote fue separado de sus labores y se le impuso una medida cautelar, lo que lo mantiene como casa por cárcel en el Seminario Cristo Sembrador de Penonomé, sin hablar con nadie y sin derecho a recibir visitas, sólo la de su madre.
Mientras que la menor continúa con su embarazo, asegurando que el padre de la criatura que nacerá a finales de este mes es el clérigo. El sacerdote ya fue a rendir declaración ante la fiscalía y se encuentra, al igual que la Iglesia y los familiares de la menor, en espera de resultados. Señaló la fiscal superior que si el sacerdote es condenado, la pena podría ser de dos a cinco años.
En cuanto a la menor, la fiscal dijo que es probable que los gastos que genera la menor embarazada sean asumidos por los padres, sin embargo, se conoció que la Iglesia se encarga de la pensión prenatal que consiste en B/.50 por mes, ya que el sacerdote no está laborando y la situación económica del seminario es crítica. |