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Con la fraudulenta demanda por calumnia e injuria con la cual se persigue al Dr. Miguel Antonio Bernal, y con el juicio de Bernal que se hará el 14 de mayo, se pretende silenciar una voz que defiende al pueblo panameño. Se persigue a Bernal porque hoy, más que nunca, el pueblo necesita que lo defienda.
Por ejemplo, ahora se ha decidido que es obligatorio comprar un triángulo fosforescente para cuando los autos tienen un problema en la carretera. En estos momentos de crisis económica, con la malicia que es producto de la experiencia, el pueblo se pregunta: ¿Es realmente necesario ese gasto? ¿Adónde va a parar ese dinero? ¿De quiénes son las compañías que venden ese triángulo?
Es la clase de cuestionamiento que Bernal hace en su programa radial corrientemente. Defendiendo al pueblo panameño, Bernal incomoda a todos los gobiernos porque en todos los gobiernos hay inmorales, oportunistas y pelechadores (con amigos solapados a quienes hacen favores) que se aprovechan de la posición que ocupan para abusar del poder y llenarse los bolsillos de plata.
Dos han sido los directores de la Policía Nacional que persiguen a Bernal con esta demanda, José Luis Sosa del gobierno de Pérez Balladares y Toty Barés, del gobierno de Mireya Moscoso. En esta demanda, que lleva cuatro años y tiene un expediente que va por setecientas páginas, dos gobiernos han gastado alrededor de B/. 100,000. Ese dinero proviene del erario, o sea del bolsillo del pueblo panameño. Pero no creo que sea la voluntad del pueblo panameño gastar dinero en demandas para proteger la imagen de la Policía Nacional.
En Panamá no habrá ni democracia, ni justicia, ni gobierno decente hasta que el pueblo se haga respetar. Sin embargo, un gobierno que realmente responda a los intereses del pueblo panameño no se logra solamente yendo a votar en las urnas cada tantos años. Es producto de la participación activa y decidida de los ciudadanos en la lucha por la justicia todos los días.
Ud. que lee estas líneas tiene la obligación patriótica y moral de presentarse el 14 de mayo a las nueve de la mañana en el Juzgado Décimo de lo Penal, ubicado en el edificio de la Corte Suprema en Ancón, para señalar con su presencia que defiende a Bernal, un hombre valiente que por más de treinta años ha defendido a los atropellados e indefensos de esta Nación. Si Ud. no defiende a quienes lo defienden, esos mismos que persiguen a Bernal continuarán haciendo con Ud. lo que quieran. Por favor, póngase de pie. Adelante, ¡Por sus hijos y por la Patria! |
