REFLEXIONES
30% (¡Treinta por ciento!)
Raymundo A. Moore W.
Mujeres panameñas,
¿realmente valen eso nada más? ¿Sólo treinta
por ciento? Eso es lo que deduzco de los planteamientos que he escuchado
-y leído- por allí; lo que no sé es, quién estableció
ese porcentaje para adjudicárselo a la mujer panameña como
cifra única para su participación en la política nacional,
o, lo que por extensión, pudiera significar su participación
en cualesquiera otra actividad pública ¡ah! pero a la hora
de ir a la cama, sus adjudicadores sin duda demandarán de ustedes
el 100%, de lo contrario, "no sirven para nada".
Según las estadísticas que aparecen en el compendio "Panamá
en Cifras" que publica la Dirección de Estadística y
Censo de la Contraloría General de la República, correspondiente
a noviembre de 1996, observamos que para 1995 (dentro del período
1991-1995), había 533 más mujeres que hombres en el país,
dentro del rango de los 35 a 39 años de edad. Esto, como ven, nos
dice que el porcentaje que no los quiere adjudicar de tan solo 30% es discriminatorio,
ya que ellas (ustedes) son más que ellos.
Por lo tanto, sigo insistiendo en que la mujer panameña debe dejarse
de tanta majadería como se las ve en los diferentes foros nacionales,
y comiencen a luchar, hasta conseguir, que se les reconozca al 100% como
tienen todo el derecho a ser vistas.
Dejen el lloriqueo y háganse respetar con valentía, demostrando
que cualesquiera sea la actividad en que se agiten, son tan buenas, o mejores,
profesionalmente hablando, que muchos de esos hombres que les quieren conculcar
a un ridículo 30%. Bien lo planteó Feijoo cuando señala
que, "Hay hombres tan malditos que dicen que una mujer no es buena,
sólo porque no quiso ser mala"
Así que ¡a la carga!a buscar, encontrar y defender ese 70%
de pura mujer que los hombres les están negando ¡"Vive
les femmes panamenies" en todo lo que vale su 100% de inteligencia,
audacia, talento, capacidad, eficiencia, profesionalismo y amor!
Ahora, quiero regalarles (permítanme el placer de hacerlo), unos
pensamientos del gran Mahatma Ghandi, y que comienza con la siguiente introducción:
He aquí las cosas que nos destruyen:
- "La política sin principios, el placer sin conciencia,
la riqueza sin trabajo, la sabiduría sin carácter, los negocios
sin moral, la ciencia sin humanidad y la adoración sin sacrificios".
Y como estamos en tiempos de recogimiento, de conversión y de
lo que se ha dado en llamar, "Cultura de Paz", a continuación
lo que escribió Sor Juana Inés de la Cruz, respecto de lo
que hoy es el machismo:
- "Hombres necios, que acusáis/a la mujer sin razón/sin
ver que sois la ocasión/de lo mismo que la culpáis./Si con
ansia sin igual/solicitáis su desdén./¿por qué
queréis que obren bien,/si la incitáis al mal?
¡Au Revoir!

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AYER GRAFICO |
El doctor Arnulfo Arias y el general Bolívar Vallarino, protagonistas
del 1 de octubre de 1968. |


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