Los moradores de las comunidades de El Cocobo, Pan de Azúcar, Los Limpios y del corregimiento de Capellanía, se sienten abandonados, puesto que las carreteras que conducen a estas áreas están totalmente dañadas y en ocasiones tienen que caminar largas distancias porque los carros no pueden pasar.
María González, una de las afectadas, señala que "los caminos son muy peligrosos, por lo que se han producido grandes accidentes de tránsito que han dejado víctimas fatales, y solicitamos a las autoridades del MOP que se acerquen a estas comunidades".
El mal estado de las calles aunado a las muchas curvas y lomas que tienen convierte el recorrido en una verdadera trampa de muerte, pues muchas veces los autos se quedan sin frenos, lo que puede ocasionar un grave accidente.
Lo que más le preocupa a los lugareños es que ya empezaron a caer los primeros aguaceros y como la carretera es de tierra, esto complica la situación, porque si estando seca se hacía dificultoso transitar, ahora que se formen los lodazales será doblemente peligroso.