Gregorio José Rodríguez Paternina y John Brayan Buitrago Gómez, continuarán presos, al rechazar la Corte Suprema de Justicia un recurso de habeas corpus presentado por su abogado defensor.
A ambos se les vincula con los homicidios de Carlos López y Juan Pablo Fonseca, cuyos cuerpos decapitados fueron hallados en Gualaca, Chiriquí el 3 de marzo del 2004.
Los sindicados negaron cargos en sus declaraciones indagatorias.
Los ahora occisos y los procesados eran integrantes de la nave Sucry-O, en donde se embarcó una droga la cual posteriormente sería entregada en las costas de México.
El operativo se fue a pique, tras ser interceptados por guarda costas norteamericanos. Ante la pérdida de la droga, López y Fonseca perdieron la vida.