El Real Madrid tendrá que esperar al menos una semana para proclamarse campeón porque pese a que hizo los deberes y goleó con espectáculo al Athletic (3-0), su inmediato perseguidor, el Villarreal, ganó a domicilio al Betis (0-1) y continúa a diez puntos del líder cuando restan cuatro jornadas.
El alirón, sin embargo, lo acaricia el Madrid, al que le bastará la próxima jornada hacer lo mismo que el Villarreal para conquistar su trigésimo primer título liguero.
La ventaja para el Madrid es que saldrá a jugar el próximo domingo contra el Osasuna en el Reyno de Navarra, a partir de las 21 horas, sabiendo lo que ha hecho el conjunto del Villarreal, que se enfrenta en casa al Getafe a las 17 horas.
El regreso al equipo después de muchas semanas en el ostracismo del argentino Saviola fue hoy providencial para el Madrid. El menudo delantero estuvo muy atento para aprovechar un rechace del meta Armando y marcar de tiro cruzado a los 14 minutos.
El triunfo no fue un camino de rosas para el líder. El Athletic le jugó sin complejos y disfrutó incluso de un penalti que milagrosamente salvó Casillas a disparo de Garmendia.
La tranquilidad llegó al Bernabéu en el minuto 74 en un medido centro desde la derecha del argentino Higuaín que empalmó con la zurda irremisiblemente el holandés Robben. Un minuto después el propio Higuaín llevó el delirio a las gradas al marcar de gran derechazo el tercero.
