Al menos once personas resultaron ayer heridas, una de ellas grave, a causa de una fuerte explosión ocurrida en la zona de salidas del aeropuerto internacional de Yakarta, en un restaurante de comida rápida.
La explosión se produjo a las 06.30 hora local (11.30 GMT del sábado) y, según un oficial del aeropuerto, aún no se sabe si la explosión se debió a un atentado. Inmediatamente después de la explosión, la policía acordonó el área, repleta de pequeñas oficinas de venta de billetes y restaurantes, aunque los vuelos siguen funcionando con normalidad.
El ministro de Transportes indonesio, Agum Gumelar, se dirigió inmediatamente al aeropuerto, donde está previsto que celebre una reunión con las autoridades del mismo. Desde el atentado terrorista en Bali, en octubre de 2002, que dejó más de 200 muertos, las fuerzas de seguridad indonesias han tenido controlada a la línea más dura del islamismo.
El ulema indonesio Abu Bakar Baasyir, presunto líder espiritual de Jemaah Islamiya, el brazo de Al Qaida en el Sudeste Asiático, fue llevado esta semana a juicio, al tiempo que la policía anunciaba la detención de otros 18 presuntos terroristas. Desde la caída del dictador Suharto, en mayo de 1998, en Indonesia se han ido sucediendo ataques frecuentes con bomba en centros comerciales. |