El excesivo ruido que generan los autobuses denominados popularmente "Diablos rojos", afectan el entorno ambiental en las ciudades de Panamá, Colón y en los centros urbanos del interior del país, elemento que debe considerar una rápida solución a la crisis del transporte colectivo, advierten científicos del Instituto Smithsonian.
En una entrevista a KW Continente, Stanley Heckadon, experto medioambiental de esta entidad investigativa tropical, dijo que la contaminación acústica afecta a la ciudad de Panamá, todo por el exceso de ruido que producen los buses, con sus troneras, regatas y su mismo funcionamiento.
Heckadon también ha dicho que los "Diablos rojos" producen demasiado humo derivado del uso de combustibles. Por ello, consideró urgente que se modernice el transporte público, trayendo vehículos como autobuses que funcionen con energía eléctrica o un sistema de tranvías, que no contaminan el medioambiente.