Cuando creemos que la vida nos sonríe al máximo suceden ciertas cosas que cambian el rumbo de la misma, pero con disposición y entusiasmo hay que echar hacia adelante y superar cualquier prueba, mejor si se tiene el apoyo de familiares y amigos.
César Peñalba es un joven a quien el destino le deparó algo que ni él ni su familia se esperaba. Cuando recién había cumplido los 18 años de edad, y aún no había culminado sus estudios secundarios, sufre un accidente en una piscina. Él realizó un clavado pero cuando se disponía a salir del agua, sintió ganas de vomitar, sus amigos corrieron a socorrerlo y llamaron a los paramédicos, al parecer había caído mal, pero cuando estos llegaron al lugar no lo voltearon por completo para que éste vomitara, sino que le voltearon la cabeza, él escuchó algo que sonó, y luego no podía moverse. Las horas de camino hacia el hospital se hicieron larga, y con ello la angustia.. Luego de varios exámenes y radiografías el diagnóstico no era alentador, al chico le dictaminaron cuadraplegia debido a una ruptura luxación C4-C5 de las vértebras.
REHABILITACION Y SUPERACION
Estuvo tres meses hospitalizado, luego viajó a Miami para recibir las terapias de recuperación. Cuando regresa se le da la oportunidad de culminar sus estudios de sexto año, pero oralmente. A pesar de todo, logra obtener su bachillerato ocupando el tercer puesto de honor de aquella promoción.
A César desde pequeño le fascinaba el mundo de las computadoras, por lo que cuando termina la secundaria, ingresa a estudiar un Técnico en Computación. Después entra a la Universidad para especializarse, pero antes había tomado un curso de inglés, ya que considera importante aprender otro idioma.
César siente que se ha recuperado moralmente de aquel día, pero si recuerda que en ese entonces tenía más amistades, pero con el paso de los años en su proceso de recuperación ha sentido que su grupo de amigos no es tan grande como antes, pero que sabe valorar lo que tiene al lado, es decir a su verdaderos amigos y en especial a su madre y hermana, quienes han sido pilares de apoyo físico y emocional.
PLANES FUTUROS
Como toda persona el joven Peñalba tiene sus metas a corto y largo plazo. La que quiere cumplir con mayor ahínco es su Maestría de Auditoria en Sistema, luego quiere obtener un buen trabajo, y tener su propia familia para así ver realizado todos sus sueños.
Su madre, la señora Luz Graciela Cedeño, mencionó que desde el día del accidente de su hijo la vida cambió para la familia, porque debieron hacer varios esfuerzos, para que el poco a poco fuera recuperando la movilidad de su cuerpo, ya que sólo podía mover la cabeza.
La luchadora madre no pierde la fe en Dios de que algún día volverá a ver a su hijo valerse por sí solo, por eso es que lo apoya en todos sus planes de estudios porque debe estar preparado para enfrentar el futuro.
Ella envía un mensaje: "Hay que hacer mayores esfuerzos por la superación de aquellos jóvenes discapacitados, pero ellos necesitan además de la ayuda de sus familiares y amigos, el apoyo de instituciones y gobierno en cuanto a equipos que le permitan lograr avances. ¡A ponerse las pilas!"..