Más de 20 computadoras están a punto de perderse de la escuela José María Roy, en la ciudad de David, Chiriquí, pero no precisamente a manos de delincuentes, sino por la desidia de las autoridades.
Este es un caso irónico que se percibe en muchos planteles del país, en donde por un lado se habla de modernización de los sistemas educativos nacionales y por otro lado las actuaciones demuestran todo lo contrario, señalan los padres de familia.
En ese sentido, María Corina Morales, directora del plantel, explicó que con el esfuerzo de los padres de familia y las autoridades, tratando de adecuar la educación a las exigencias de los tiempos se realizaron trámites con las embajadas de Japón y España para la donación de unas computadora, pero el único requisito que exigieron fue construir el aula especializada, para dar confortabilidad a los estudiantes..
Algunos fondos que tenía la Asociación de Padres de Familia se usaron, pero no les alcanzó por lo cual tuvieron que recurrir al Ministerio de Educación que se comprometió en donar los materiales de electricidad y las baldosas.