Una delegación de observadores internacionales llegará hoy a Panamá para verificar el desenvolvimiento del proceso electoral de cara a los comicios generales del próximo dos de mayo de 2004, indicó el Tribunal Electoral.
Según el magistrado Denis Allen, la delegación de cerca de 300 observadores, se quedará de forma permanente en Panamá hasta la fecha de las elecciones e implementarán diversos puntos de vigilancia a lo largo del país.
Tanto la Organización de Estados Americanos (OEA y un grupo de defensores del pueblo de Centro América, llegarán al istmo a monitorear el proceso de votación y escrutinio.
De igual manera, la Iglesia Católica y la Comisión de Justicia y Paz tendrá su propia misión observadora, compuesta de 1,500 miembros que serán destacados en varios puestos de votación en Panamá.
Allen también solicitó a los miembros de las embajadas y consulados extranjeros en Panamá que participen en la vigilancia de las elecciones. Denuncias
En medio de denuncias de campañas sucias y posible fraude electoral la participación de observadores internacionales es vista con buenos ojos tanto por legisladores de oposición y del oficialismo.
El legislador perredista, Elías Castillo, dijo ayer que la presencia de la misión de observadores es importante y necesaria porque contribuye a que el Tribunal Electoral (TE) se esfuerce en medio de un torneo electoral para lograr una mayor organización. Añadió que su participación contribuye a evitar que los oficialistas intenten burlar la voluntad de las mayorías.
Castillo dijo que no solo el TE será el responsable de traer observadores, sino que los partidos políticos harán lo propio para garantizar que la voluntad del pueblo sea respetada.
Recomendó que se invite observadores que tenga amplia experiencia en procesos electorales celebrados en América Latina.
En tanto el legislador oficialista, Jacobo Salas, sostuvo que ante la celebración de unas terceras elecciones puras, es bueno que delegaciones internacionales sean garantes del respeto al voto.
Consideró que la elecciones del 2 de mayo, no serán diferentes a las de hace cinco años, porque la nota característica será que el sufragio será respetado independientemente de quien resulte vencedor.