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Un abogado rescató a Lynch.  |
Jessica Lynch, la soldado estadounidense capturada por los iraquíes y liberada en una operación espectacular de la CIA y las fuerzas especiales en Nasiriya, debe la vida a un abogado iraquí y su familia, según 'The Washington Post'.
Fue este abogado, un chií de 32 años de nombre Mohamed, quien observó la presencia inhabitual de unos 40 milicianos y agentes de la seguridad iraquí en el hospital de la localidad, cuando iba a visitar a su esposa, enfermera en dicho centro.
El abogado se interesó por el hecho y averiguó que el hospital albergaba a un militar de EEUU herido. Gracias a un amigo médico, se pudo acercar al área de urgencias donde Jessica Lynch estaba ingresada y vigilada por un un agente, completamente vestido de negro, que en ese momento la estaba abofeteando, según el citado diario.
"Se me rompió el corazón" viendo esa escena, ha dicho Mohamed al diario, y añadió: "Entonces decidí encontrar a los soldados americanos para decírselo". El iraquí anduvo 10 kilómetros antes de encontrar a una unidad de marines, a quienes se acercó con las manos en alto. Los dos días siguientes, el abogado volvió al hospital a petición de los marines, para suministrarles detalles, contar a los agentes de seguridad y detallar qué armas tenían.
En una de esas visitas, pudo acercarse brevemente a Jessica Lynch para consolarla. También se enteró de que el hospital pensaba amputarle una pierna y convenció a su amigo médico de que intentara retrarsar la intervención.
Con mapas y croquis dibujados por el abogado y su esposa, comandos de las fuerzas especiales de EEUU lanzaron la ofensiva contra el hospital y liberaron a la soldado. |
