El gobernador de Puerto Rico, Aníbal Acevedo Vilá, se declaró inocente ante un Tribunal Federal de Estados Unidos de las acusaciones de corrupción que se le imputan.
El político acudió este ayer a la sede del tribunal, en San Juan, la capital, acompañado por su abogado, Thomas Green, mientras cientos de manifestantes del Partido Popular Democrático (PPD) se congregaron en las afueras para expresar apoyo a su máximo dirigente.
La fiscalía federal estadounidense acusó a Acevedo Vilá de conspirar para violar las leyes de financiación electoral, de fraude y de mentirle a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, según sus siglas en inglés).