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La muy transitada vía hacia Felipillo está sin líneas amarillas divisorias, que identifique cual paño es para ida y vuelta hacia la ciudad de Panamá.  |
Los automovilistas y demás conductores que se adentran en la Carretera Panamericana, entre el tramo de la 24 de diciembre hasta Felipillo, deben primero persignarse ante el peligro que representa manejar un vehículo en una vía sin señalización adecuada.
Varios conductores han criticado el hecho de que no haya línea amarilla doble para dividir la carretera. Tampoco hay faroles en todo el tramo, para alumbrar el camino. Mucho menos hay resaltos, letreros de aviso de curvas peligrosas y salidas de camiones, además de semáforos para controlar los cruces viales, en especial el mismo paso entre la Vía Tocumen y la Carretera Panamericana.
Otro caso sensitivo es la falta de limpieza a los hombros de la carretera, pues hasta cachivaches y bolsas de basura hay en todo el trayecto.
Según vecinos de Felipillo, los asaltos en la noche son muy comunes, incluso en el día.
Por ello, se pide al Ministerio de Obras Públicas y a la Autoridad del Tránsito que hagan algo para resolver este problema, el cual molesta a los moradores de las comunidades vecinas a Tocumen y Pacora. |