Si usted compara el ayer, con el hoy, terminará diciendo como yo, tiempos pasados que no volverán: veamos.
Ayer una sopa de "wantón" costaba 30 centavos el plato, hoy B/.2.50.
El transporte en las chivas y los buses en la ciudad capital costaba 5 centavos, hoy 25 centavos y hasta 75 centavos.
La entrada al cine ayer era en los cines de estreno 60 centavos, cine con dos películas 35 centavos y cines de barrio tres películas por 10 centavos. Ahora una sola película por B/.3.50.
Ayer un galón de gasolina costaba 30 centavos, ahora un galón cuesta B/.2.74.
Ayer la entrada a un baile costaba 1 balboa los hombres, las mujeres no pagaban, ahora es 5 balboas por persona.
Ayer una taza de café con leche costaba 10 centavos, hoy hasta B/.1.50 la taza.
Ayer el consumo mínimo por energía eléctrica era de 25 centavos, ahora es de 10 balboas.
Ayer se cambiaba mangos por botellas, ahora es rigurosamente en efectivo.
Ayer una empleada doméstica ganaba 30 balboas mensuales, casa y comida, ahora B/.150.00 mensuales, pero sin casa.
Ayer la carrera en un taxi era de 25 centavos, hoy 1 balboa.
Y la pregunta es:
¿Con qué época se queda usted?