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EDITORIAL
Albrook e improvisación
La intención de trasladar nuevamente el aeropuerto Marcos A. Gelabert demuestra la falta de planificación de los gobiernos panameños. A raíz de la construcción del Corredor Sur se le entregaron a la empresa mexicana ICA los terrenos de ese terminal aéreo en Paitilla.
El Estado se desprendió de las 29.4 hectáreas del aeropuerto en Paitilla. Eran tierras valiosas. Allí funcionó desde 1935 un terminal, primero bajo operación de los norteamericanos, y luego bajo administración panameña.
Quién no recuerda el lío que se armó durante el gobierno anterior, cuando se trasladó el aeropuerto a Albrook y luego se produjo una puja y repuja, porque se afectaron terrenos para las operaciones portuarias de la Hutchinson.
En enero de 1999, el aeropuerto de Paitilla se mudó a Albrook y ahora se recomienda mudarlo a Howard, porque sus terrenos son los adecuados para levantar la Ciudad Gubernamental.
Desde un principio se anunció que los terrenos del campo de antenas de Clayton, sería el sitio escogido para ubicar la Ciudad Gubernamental, pero luego nos sorprenden seleccionando Albrook.
La Ciudad Gubernamental es un proyecto inspirado en una ciudad similar existente en Brasil. La idea es que sea un proyecto 100% financiado por la empresa privada, a través de un sistema de construcción, operación y transferencia posterior al Estado. Se establecería una especie de leasing como si el Gobierno continuara pagando un arrendamiento por las oficinas públicas. El pago de alquiler genera gastos anuales al Estado por el orden de B/.25 millones.
La iniciativa no es mala, lo malo es el apuro que se trae con el proyecto, lo cual genera dudas en una opinión pública, que ya no cree en nadie ni en nada.
Además el nuevo traslado pone de manifiesto las improvisaciones propias de Panamá, ya que resulta inconcebible que apenas dos años de haberse implementado el traslado del aeropuerto de Paitilla a Albrook, ahora se piense en otro cambio. ¿Qué pasa con nuestros técnicos, por qué se improvisa tanto?.
Para colmo de males, se desarrolla un estudio y no se consulta a los sectores afectados y hoy esa situación nos mantiene inmerso en una huelga de pilotos, que se oponen al traslado.
Para contramatar, el gobierno alega que lo del traslado es un bochinche, obviando que una propia información procedente de la Presidencia, adelantaba la reubicación del Marcos A. Gelabert en Howard. El país no puede andar de improvisaciones en improvisaciones. Hay que ser serios.
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PUNTO CRITICO |
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