De diferentes comunidades continúan llegando las denuncias referentes al aumento de las competencias de velocidad en automóviles, mejor conocidas como "regatas" particulares y en buses de transporte colectivo con la variante de que antes se registraban en horas nocturnas y ahora se dan a diferentes horas del día.
Las quejas y protestas por estas conocidas regatas provienen de lugares disímiles entre sí tales como la barriada Torrijos Carter, calle 50, Vista Alegre de Arraiján, Altos de Cerro Viento, Tumba Muerto, entre otras comunidades.
Las autoridades policiales informan que un alto porcentaje de los casos registran como conductores de los vehículos particulares a jóvenes de 17 a 25 años de edad y en los buses de transporte colectivo a personas de 22 hasta los 40 años.
Asímismo, indican las estadísticas que quienes se dedican a las carreras improvisadas e ilegales son varones, en un 92%, quienes no respetan las reglamentaciones del tránsito, especialmente en lo concerniente a los límites de velocidad, a los altos en las intersecciones y al manejo en poblados.
Se han registrado atropellos, colisiones entre vehículos, colisiones con residencias, así como con objetos fijos, entre otros, los cuales han provocado decenas de muertes, cientos de lisiados, vehículos destrozados, residencias impactadas, además del luto dolor y llanto en los hogares panameños.
En lo que va del año se han registrado 88 muertes por accidentes de tránsito, de las cuales más de la mitad corresponden a la irresponsabilidad en el manejo, entre ellas, el exceso de velocidad, hacer caso omiso a las señales del tránsito y al haber consumido alcohol y drogas.
Desde la populosa barriada Torrijos Carter en San Miguelito, las denuncias han aumentado durante el último mes y todas, enfocan el problema entre los conductores de los conocidos "diablos rojos" y los nuevos "diablos blancos", quienes en la vía principal, incluso, frente al templo católico de la comunidad le imprimen más velocidad a sus máquinas.
Situaciones similares se registran en Vista Alegre de Arraiján, en la calle 50 y en la vía Ricardo J. Alfaro, mejor conocida como "Tumba Muerto" y en las calles de Cerro Viento.
En ocasiones las autoridades del tránsito y de la policía han intervenido, logrando aliviar temporalmente esta anomalía, pero a escasos días los mismos sujetos vuelven a sus andanzas poniendo en peligro sus vidas y la de muchos otros inocentes que tienen la necesidad de transitar por nuestras calles.
Como ejemplo una barriada donde esta situación cobra niveles alarmantes es Alto de Cerro Viento. Así, es el caso, de la calle principal y calle K que en un año la vivienda 713, ha resultado con daños debido a que varios vehículos que se han estrellado contra su cerca y sus paredes. El último accidente ocurrió el pasado fin de semana, aproximadamente a la media noche, al colisionar el vehículo con placa 242267, que era conducido por Michelle Isaza. Michelle Pérez , quien iba acompañada por otra joven y el auto que conducía, Gabriel Isaza, que a su vez iba acompañado por dos jóvenes, estos últimos resultaron con lesiones de consideración.
El análisis de los observadores y entendidos concluyen que el accidente se produjo por el exceso de velocidad de ambos vehículos. Esta situación ha motivado que los moradores de Altos de Cerro Viento se estén organizando y solicitando por escrito a las autoridades correspondientes que tomen las medidas pertinentes para evitar la zozobra en que actualmente viven producto del proceder de conductores que no respetan los reglamentos del tránsito. Entre las medidas que solicitan los afectados podrán están la instalación de los denominados "policías muertos", "ojos de gatos" o la instalación de un semáforo, a fin de aminorar los peligros que enfrentan. |