Los españoles rindieron homenaje a la memoria de las 191 personas, de ellas 51 inmigrantes, que murieron hace tres años en los atentados contra cuatro trenes que se dirigían a Madrid, y honraron a los casi 2, 000 heridos, con distintos actos en todo el país.
Los gobernantes y otras autoridades, presidieron el acto solemne de inauguración del monumento levantado en memoria de las víctimas frente a la estación de ferrocarril de Atocha, en el centro de Madrid, a donde se dirigían los trenes atacados.
En medio del silencio fue descubierto el monumento, un enorme cubo de cristal transparente que refleja la luz, de 11 metros de altura, formado por 15, 000 ladrillos de vidrio macizo.