Las autoridades rusas anunciaron el martes que las fuerzas especiales de la FSB (ex KGB) mataron en Chechenia al presidente independentista Aslan Masjadov, símbolo de la resistencia chechena.
En un encuentro retransmitido por televisión, el jefe de los servicios secretos, Nikolai Patrushev, confirmó al presidente Vladimir Putin la muerte de Masjadov, después de que el canal NTV emitiera imágenes de un cadáver que parecía ser el suyo.
"Hoy en la república de Chechenia, en el pueblo de Tolstoy Yurt, las fuerzas especiales llevaron a cabo una operación, en la que mataron al terrorista internacional y líder de bandas armadas Masjadov y arrestaron a sus colaboradores más cercanos", afirmó Patrushev.
"Allí todavía hay mucho trabajo. Tenemos que redoblar esfuerzos para proteger de los bandidos (chechenos) a la población de la república y de toda Rusia", declaró Putin.
Su muerte representa una gran victoria para los rusos, que ofrecían 10 millones de dólares por su cabeza desde el sangriento secuestro masivo en una escuela de Beslan (Osetia del Norte, Cáucaso ruso) en septiembre pasado, según informaciones oficiales.