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La cruda realidad del transporte darienita
Isabel Castro
Crítica en Línea
Aunque parezca una historia, los usuarios de la flota de buses que viajan desde la ciudad capital hacia la provincia de Darién deben enfrentarse diariamente con la muerte, debido al pésimo estado en que se encuentran los vehículos que amenazan con causar una tragedia. José Naranjo, usuario de estos transportes, contó la odisea de la que fue testigo en uno de sus recientes viajes, debido al poco mantenimiento que se le brinda a los autobuses colectivos. "Tomé el autobús a las 8:00 a.m. y sufrió el primer desperfecto al salir de la reserva de Bayano y el segundo unos kilómetros más adelante, lo que puso en peligro la vida de más de 30 personas y alteró las actividades que los pasajeros tenían programadas para ese día", relata. Indicó que en el tramo de Ipetí el vehículo se averió completamente, por lo que se le devolvió a los usuarios parte del pasaje pagado en la terminal y las personas quedaron a su suerte, teniendo que decidir si esperaban el próximo autobús o buscar los mecanismos para continuar el recorrido en otro vehículo. Señaló que en Ipetí tomaron 3 horas, bajo un sol sofocante y sin agua ni restaurantes cerca donde poder comprar alimentos. "Al llegar el nuevo autobús a nuestro auxilio eran las 3:00 p.m. y el vehículo fue abarrotado por más de 60 personas, entre los cuales se encontraban recién nacidos, ancianos, una mujer de Filipinas y dos caballeros de Dinamarca. ¡Qué ejemplo de servicio!", exclamó. Recalcó que el segundo autobús se encontraba en peores condiciones, ya que se averió 7 veces en el tramo comprendido entre Ipetí y Cañazas. "No le pasaba combustible, porque la manguera estaba obstruida entre el tanque y el motor, al tiempo que el vehículo se recalentaba y derramaba aceite", dijo. Prosiguió su relato indicando que llegó a Metetí a las 10:00 p.m., a bordo de un tercer autobús, después de un verdadero calvario, señalando que los pasajeros estaban hambrientos, agotados y sin dinero para pagar un hotel donde pasar el resto de la noche, ya que a esa hora no se presta el servicio de rutas internas. "Dios nos proteja siempre", agregó Naranjo, dando las gracias al Todopoderoso por haber llegado sano y salvo a su destino, luego de 14 horas de haber salido de la ciudad capital, al tiempo que solicitó a todos los que se encuentran involucrados en la problemática subsanarla lo antes posible, para evitar posibles desenlaces fatales debido a la falta de mantenimiento de los transportes.
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"Dios nos proteja siempre", agregó Naranjo, dando las gracias al Todopoderoso por haber llegado sano y salvo a su destino, luego de 14 horas de haber salido de la ciudad capital, al tiempo que solicitó a todos los que se encuentran involucrados en la problemática subsanarla lo antes posible, para evitar posibles desenlaces fatales debido a la falta de mantenimiento de los transportes.
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