El presidente del Parlacen, Dorindo Cortez, afirmó que los representantes de Panamá ante ese organismo seguirán en la sede en Diablo, pese a pedidos del gobierno para que la abandonen.
Según Cortez, el gobierno les envió una nota donde los insta a abandonar el edificio, plazo que vence hoy miércoles.
"No la vamos a entregar. Rechazamos la petición y nos vamos a mantener en el sitio", agregó.