Víctor Lening Barría Hoque, de 23 años, el último de los implicados en el descuartizamiento del hombre encontrado la semana pasada en una letrina en el sector de Santa Marta, corregimiento de Alcalde Díaz, fue capturado en la mañana de ayer en el sector de Vista Alegre. El sujeto es señalado por los otros dos detenidos como la persona que descuartizó a la víctima.
La captura de Barría Luque se produjo por parte de efectivos de la Sub-Dirección de Información e Investigación Policial de La Chorrera, gracias a una llamada telefónica, según informó el subcomisionado, Efraín Vernaza, en conferencia de prensa.
De acuerdo con fuentes allegadas a las investigaciones, el día de los hechos la víctima- que según los implicados les había robado un gallo- pasó frente a la casa del dueño del animal y lo llevaron hasta la misma en donde le dieron una tremenda golpiza que lo dejó en estado inconsciente. Agregó la fuente que luego de 48 horas, los implicados volvieron al lugar y se percataron que el hombre permanecía en el mismo sitio que lo habían dejado. Estaba muerto.
Fue entonces que acordaron descuartizarlo para luego meterlo en bolsas y arrojarlo en una letrina y así deshacerse de la víctima. Sin embargo, Víctor Lening Barría niega que él haya sido la persona que descuartizó al muerto, ya que según dice, cuando sus amigos estaban planeando el descuartizamiento, se negó a participar, se retiró del lugar y luego decidió viajar a Vista Alegre, lugar donde fue encontrado porque había oído que lo iban a matar.
El presunto descuartizador reside en el corregimiento de Villa Rosario, distrito de Capira, pero según dijo, tenía un cuarto en Alcalde Díaz donde vive con su mujer y una hija.
LA VÍCTIMA
Pacífico Calderón era un hombre de 30 años de edad, enfermo y adicto a las drogas. Fue capturado infraganti por sus asesinos cuando intentaba robar un gallo de pelea. Los homicidas le dieron una paliza y lo apuñalaron. Asustados, decidieron quemar el cuerpo, descuartizarlo y después arrojarlo a una letrina con un orificó de 10X10 pulgadas de diámetro.
No satisfechos los homicidas, condenaron la letrina para evitar que los olores se sintieran. Parecía que todo les saldría bien a los homicidas, pero no contaron con unas llamadas telefónicas anónimas hechas a la Policía, a la Fiscalía Auxiliar y la PTJ.
Las autoridades encontraron el cadáver en un lote baldío detrás de una residencia, cuya dueña dijo que no sintió el olor putrefacto que se apoderó del lugar, ni tampoco escuchó nada. Una vez ubicado el sitio exacto, en Santa Rosa de Alcalde Díaz, en la calle Santa María, iniciaron los trabajos. Primero fue la cabeza, luego una pierna, el fémur, el tórax, otra pierna y después las extremidades superiores. Uno a uno fueron recuperados los restos del hombre.
Para recuperar los restos se necesitó de poco más de cuatro horas de trabajo. Unidades del Cuerpo de Bomberos y la Policía, primero utilizaron mazos para romper la letrina y después utilizaron sogas para sacar los cuerpos. Los restos fueron depositados en cartuchos negros de basura, (varios de ellos se rasgaron) y en tanques de cinco galones.
Olivia Chavarría madre de Pacífico, pidió justifica para su hijo "porque a pesar de que era un enfermo, tenía una madre y unos hermanos que siempre velaban y luchaban por él. De todo corazón espero que nunca salgan de la cárcel y les deseo que el doble que le hicieron a mi hijo se los hagan a ellos, y aunque eso ocurra, jamás pagarán porque mataron a un hombre enfermo que al pegarle no se levantaba", dijo. |