La prevalencia del asma ha aumentado en forma dramática en los últimos diez años. La Organización Mundial de la Salud estima que el asma es, en la actualidad, una de las enfermedades infantiles crónicas más comunes, que afectan en promedio a más de 10% de la población.
De acuerdo con los expertos, 50% de los infantes y niños menores de tres años de edad tendrán por lo menos un episodio de sibilancia y los infantes con sibilancia o jadeo recurrente tienen un alto riesgo de desarrollar asma persistente al momento de llegar a la adolescencia.
Desde el punto de vista tradicional, el manejo del asma crónica en los niños ha diferido poco del tratamiento ofrecido a los adultos.
Los aspectos específicos del asma pediátrica, entre otros las estrategias terapéuticas, están limitados y hay una falta de criterios internacionales actualizados para el asma pediátrica. Ahora, por vez primera hay un conjunto de recomendaciones internacionales enfocadas en el diagnóstico, monitoreo y manejo práctico del asma infantil que pueden servir como una guía para la práctica clínica.
ASMA: UNA CONDICION INFLAMATORIA
Los científicos no entienden del todo las causas del asma, pero parece claro que hay un componente genético así como factores ambientales y de estilo de vida. Se sabe también que el asma es una respuesta a ciertos activadores en el ambiente, como el polen, cambios climáticos y ciertas infecciones virales y el ejercicio.
En personas con asma, el revestimiento de las vías respiratorias se vuelve inflamado de manera crónica y, en presencia de un disparador, los músculos que rodean a las vías respiratorias se tensan y las vías respiratorias se vuelven más estrechas, lo cual dificulta respirar.
El asma de los niños es diferente de la del adulto, por lo que requiere un método distinto de tratamiento, pues sus sistemas inmunes están inmaduros y tienen vías respiratorias más pequeñas que se obstruyen con más facilidad. Por lo tanto, es importante manejar y monitorear bien al asma en los niños, y las nuevas recomendaciones ofrecen a los médicos clínicos formas prácticas de atender estas cuestiones.
PENSAMIENTO NUEVO
Las nuevas recomendaciones del asma en la infancia han sido formuladas por algunos de los expertos en asma más prestigiosos del mundo. El grupo tomó en cuenta la investigación y consideraciones más recientes para el asma infantil y revisa la historia natural y fisiopatología del asma pediátrica.
La evaluación y el reconocimiento cuidadosos de los activadores del asma es importante en la educación, control ambiental y pronóstico del paciente.
La identificación de los fenotipos del asma (asma inducida por virus, asma alérgica y síntomas inducidos por actividad) deben intentarse siempre, incluso la evaluación del estado atópico.
La prueba alergénica (todas las edades) es importante para confirmar las posibles contribuciones de alergenos a las exacerbaciones de asma.
TERAPIAS
El tratamiento de la inflamación de las vías respiratorias conduce al control óptimo del asma.
El ejercicio no debe evitarse; se debe alentar a los niños asmáticos a participar en los deportes, con control eficiente de la inflamación por asma y los síntomas.
Los esteroides inhalados (ICS) son el tratamiento de primera línea para el asma persistente. No obstante, la nueva evidencia no respalda un papel modificador de la enfermedad después del cese del tratamiento con ICS en niños de edad preescolar.
Los LTRA son un tratamiento optativo de primera línea para el asma persistente. La edad de los más jóvenes (menores de diez años) y los altos niveles de leucotrienos urinarios predicen una respuesta favorable. Sugeridos como tratamiento de la sibilancia inducida por virus.
Considere la inmunoterapia con alergenos apropiados para el asma alérgica y dentro de las indicaciones autorizadas sólo cuando el componente alergénico esté bien documentado y estén disponibles extractos alergénicos confiables
La educación asmática es una parte integral del manejo del asma y debe ofrecerse a todas las partes involucradas.