Son tantos los cadáveres que dejó el terremoto en Haití, que deberán ser enterrados en fosas comunes.
Las víctimas fatales redondean los 100 mil.
El forense panameño José Vicente Pachar, parte de la delegación que partió hacia Haití el pasado jueves, informó que probablemente se apoyen en las autopsias forenses para identificar a cuerpos de los extranjeros, pero en el caso de los haitianos, las necropsias se aplicarán sólo si se trata de una figura reconocida del país. El resto será enterrado en una fosa común.
El especialista explicó que en los países de América Latina, cuando suceden desgracias similares las fosas son consideradas lugares sagrados, pero en la cultura haitiana se desconoce cómo se manejará la situación.
Ante el amontonamiento de cadáveres, Pachar aclaró que los mismos no provocan enfermedades, sólo mal olor. Las enfermedades provienen de los vivos por la falta de higiene y de agua potable. Las personas pueden padecer diarreas, cólera y parasitosis.
Los cuerpos muertos se descomponen dependiendo del clima, y en Haití se estima que en 24 horas los cuerpos se hinchan y se llenan de gusanos; a los tres o cuatro días ya están irreconocibles.
La delegación panameña debió llevar mascarillas, pero en vista de la carencia de las mismas en los rescatistas, se espera contar con el apoyo de las misiones de otros países.
ODISEA
Varada en Santo Domingo, República Dominicana, quedó hasta ayer, viernes, en la mañana, la delegación de Panamá que lleva ayuda humanitaria hacia Haití.
Como a las 11:00 p.m. del jueves, el grupo llegó al Centro de Operaciones de Emergencias (COE) donde durmió en colchonetas que facilitó el COE de ese país.
Después de las 10:00 de la mañana de ayer, viernes, los rescatistas partieron hacia la frontera con Haití, por carretera, debido al congestionamiento en el aeropuerto en Puerto Príncipe.
El jefe de la delegación de rescatistas panameños, Heriberto Chávez, del SINAPROC, explicó que la delegación se instalaría en una base militar dominicana, desde donde se trasladarían a Puerto Príncipe para hacer las labores de rescate. Y al caer la tarde, regresarían a dormir a la frontera. Así lo harán cada día, mientras dure la misión.
En Haití, los panameños serán custodiados por efectivos militares dada la crítica situación que en el país caribeño, donde los asaltos y los saqueos son la nota predominante en el escenario de muertos, heridos, destrucción y caos.
El gobierno haitiano decretó un toque de queda desde las 5:00 de la tarde para brindar seguridad a la población.
MEDIDAS
Los encargados de la delegación no permiten a los periodistas separarse del grupo para hacer entrevistas, debido al peligroso escenario al que se enfrentan. Por el camino se ven numerosos convoyes con ayuda para los damnificados haitianos.
Se informó que la delegación de Panamá laborará conjuntamente con los rescatistas alemanes, que tienen equipo especializado de rescate y médicos, además de cinco perros de rescate.
