Las esperanzas de encontrar supervivientes entre los escombros de Puerto Príncipe se reducen con rapidez no sólo por el paso del tiempo, sino por la subida de temperaturas registradas, que acelera la deshidratación de los cuerpos.
Expertos en rescate de supervivientes dijeron a EFE en el aeropuerto Toussaint Louverture de la capital haitiana que los dos primeros días tras el terremoto hubo mayores esperanzas, pues las temperaturas, aunque calurosas, no han sido muy altas, pero ayer el cielo amaneció sin nubes y el sol calentó con fuerza la ciudad, lo que agrava la situación.
El doctor Eloy García Mondragón, médico del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUME), de la Ciudad de México, explicó que "las esperanzas de encontrar gente con vida son muy bajas", por lo que las personas que no sean rescatadas tendrán escasas posibilidades de salvarse.
ALERTA
La imposibilidad de acceder a todas las zonas afectadas por el terremoto de Haití y retirar los cadáveres tres días después del seísmo puede provocar la aparición de epidemias entre los supervivientes, alertó la ONG Ayuda en Acción.
El director de esta Organización No Gubernamental en Haití, Jean-Claude Fignole, hizo por ello un llamado a la comunidad internacional para que los cuerpos que hay "por todas partes" sean retirados, ya que "el riesgo de que se extiendan las enfermedades y epidemias es importante".
MEDIDAS
Los Gobiernos de Brasil, Haití y República Dominicana establecieron una serie de medidas prioritarias ante la emergencia que atraviesa el país, entre ellas el rescate de las víctimas y la creación de albergues, informaron fuentes oficiales.
Estas propuestas resultaron de la reunión que el gobernante dominicano, Leonel Fernández, mantuvo en Puerto Príncipe con su homólogo haitiano, René Préval, y en la que participó el ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim.
Las medidas también contemplan sepultar en fosas comunes a los muertos, establecer la comunicación telefónica y el servicio de energía eléctrica e instalar tiendas de campañas y hospitales fijos para atender a la población afectada, según un comunicado de la Presidencia Nacional de República Dominicana.
Las acciones se llevarán a cargo en coordinación con el Gobierno de Brasil.