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TEMAS DE ACTUALIDAD
Un servicio de lujo con conductores de cloacas
Raymundo A. Moore W.
Los conductores de buses que no califican dentro del marco de las siguientes críticas, tómenlas sólo como una advertencia. Para aquellos de ustedes que caen dentro de la denuncia que a continuación formulo, ojalá que hoy sea el último día que fungen como conductores de buses, especialmente los de lujo. La ruta en cuestión era "Corredor Norte-Mano de Piedra" y el bus involucrado un KIA de lujo, con aire acondicionado, y el número SEL-044, cobrando un pasaje de B/.0.75. Este colectivo, al llegar Cerro Batea, el secretario (ese que cobra), se acerca a los que quedábamos en el bus - 3 adultos y 2 niños - para preguntarnos "hasta dónde íbamos...". Mi hija y yo le anunciamos que hasta la Subestación de Policía de Mano de Piedra y la tercera pasajera le indicó que El Valle de Urracá, pero una vez enterado de esto, el conductor, apartándose de la ruta, bajó por la loma del Centro de Salud de Cerro Batea, y doblando (girando) arbitrariamente en dirección hacia su piquera, ubicada en las cercanías de Cerro Cocobolo, ofreció a cada uno de nosotros veinticinco centésimos para que "cogiéramos una chiva que nos condujera hacia nuestro destino". Como ustedes se lo pueden imaginar, la acalorada discusión no se hizo esperar, pero como entre los pasajeros, repito, había niños, uno de 7 años y otro de apenas 8 meses, la sangre no llegó al río, pero les aseguro, señores del Tránsito, que bajo otras circunstancias, uno de los dos, el conductor o el pasajero varón que en dicho bus viajaba (que es quien suscribe esta columna), hubiera terminado en la cárcel, el hospital o la morgue. Sin embargo, sirva este medio, y esta columna, para emplazar tanto a la SICOTRAC, como a la Dirección de Operaciones de Tránsito y a la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre, para que ordene la separación inmediata del referido conductor, quien no sólo actuó con irrespeto y sin ninguna consideración hacia los usuarios, sino que además violó los reglamentos que gobiernan el servicio que deben brindar esos colectivos, al no completar el recorrido que contempla la ruta Corredor Norte-Mano de Piedra. Situaciones como estas son las que le restan los méritos a las justas aspiraciones de aquellos conductores honestos y responsables que sí cumplen con sus obligaciones y es lo que le hace daño al resto del gremio de la SICOTRAC, ya que actúan a la libre con una prepotencia que raya en el más grosero irrespeto hacia aquellos a quienes se deben, o sea a los usuarios. Me importa un comino cómo se llama ese conductor de cloacas, pero es fácil ubicarlo porque el incidente que aquí denuncio, ocurrió el domingo 6 de enero, entre las 8 y las 9 de la mañana. Por todo lo anterior, exhorto a las autoridades correspondientes (del Ministerio de Gobierno y Justicia), que tomen muy en cuenta casos como éste a la hora de evaluar los motivos que plantea el gremio de los transportistas para solicitar la cacareada "unificación" del pasaje. En lo que respecta a ese salido de las cloacas que está usurpando la noble profesión de conductor, si yo fuera ustedes, ¡lo boto! ¡Au Revoir!
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