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FAMILIA
Las primeras
vacaciones solos
Tomado de
CNN
Consejos
para que la primera experiencia de vida independiente no implique
riesgos ni conflictos.
Irse de vacaciones con un grupo de amigos es, además
de una vivencia inolvidable, un primer acercamiento a la vida
como adultos. Alquilar un departamento, cocinar y manejar un
presupuesto algunas veces acotado, son algunas de las situaciones
que el adolescente debe enfrentar en tales casos.
También significa resolver riesgos y peligros: "Drogas
y alcohol, posibles accidentes, la posibilidad de estar en contacto
con grupos indeseables", enumera Irene Loyácono,
presidenta de la Sociedad Argentina de Terapia Familiar.
"Es una experiencia nueva, sin que los adultos establezcan
el control, en un ambiente que pone al adolescente en una situación
de borde todo el tiempo", agrega Susana Quiroga, profesora
titular de la cátedra de adolescencia de la Facultad de
Psicología de la Universidad de Buenos Aires, Argentina.
Advierte, además, que el niño o joven puede
encontrarse con chicos `problema´, "que son en general
los inhibidos y los impulsivos, que frente a la situación
de soledad se desbordan y hacen desastres".
MOMENTO DE INICIACIONES
Las relaciones con el sexo opuesto, las drogas, el alcohol...
durante sus vacaciones con amigos y sin adultos, el adolescente
enfrenta decisiones importantes, aunque muchas veces no sabe
qué hacer. Por ello, Susana Quiroga recomienda recurrir
siempre a la siguiente medida: "Es preferible que no hagan
cosas para las que no se sienten preparados, a que hagan de más".
¿Y cuándo se puede decir que un joven está
preparado para entablar relaciones sexuales? Aunque los especialistas
afirman que los tiempos personales pesan, en líneas generales
es importante que se cumplan algunas condiciones.
"Antes que nada, los chicos deben manifestar su deseo
de hacerlo con la suficiente intensidad", asegura Loyácono.
"Esto generalmente se da entre los 16 y los 18 años,
aunque depende del carácter del joven y del criterio de
la familia", agrega.
Por su parte, Quiroga dice que los 18 años son una
buena edad para hacer esa primera experiencia, "porque ya
saben manejarse solos y asumir ciertas responsabilidades".
Aunque admite que algunas veces se puede dar entre los 16 y los
17 años. "Pero antes de los 15 no están preparados
para afrontar las situaciones de agresión, intolerancias
y desbordes que pueden surgir", advierte la autora de Patologías
de la autodestrucción en la adolescencia.
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Aunque los especialistas
afirman que los tiempos personales pesan, en líneas generales
es importante que se cumplan algunas condiciones.
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