Se nos presenta un nuevo año y después de agradecer a Dios el que nos haya permitido vivir uno más, nos corresponde hacer un balance de lo realizado en el año que pasó y proponernos metas para el actual. En el plano nacional, según opinión muy personal, vivimos el peor gobierno de los últimos años. La corrupción, la injusticia y el desgreño administrativo fueron las características imperantes en estos pasados cinco años, con mayor énfasis en el que acaba de terminar.
Creer que en poco tiempo veremos en la cárcel a quienes hicieron de la cosa publica su modus vivendi, es hacerse ilusiones vanas.
Nada más hay que analizar lo que dijo un conocido abogado, cuando alguien vaticinaba que pronto estaría en la cárcel el alto funcionario bancario que actualmente huye de la justicia.
Consideró el abogado que quien así se expresaba era un ignorante en materia judicial. Y claro que es un ignorante, pues no conoce que el tal abogado transita por los "vericuetos" de la ley, que le facilita lograr la libertad de reconocidos asesinos y escapar del país, incluso con la ayuda de altas autoridades policiales.
Todos los panameños esperamos que este nuevo gobierno, al término de su periodo nos deje un país más justo, honesto y equitativo, comenzando a dar señales en este 2005.
A mis compañeros cooperativistas en especial, pero igualmente a todos mis conciudadanos, les dejo un mensaje extraído de un periódico argentino, especializado en cooperativismo.
El articulo, titulado "Revaloricemos las virtudes", nos dice: "con la intención de que los jóvenes y los niños tengan buenos modelos para imitar y tomen ejemplo de las buenas acciones que diariamente realiza la mayoría de los seres humanos, los invitamos a que los hagan participar de los actos solidarios que realicen y así podamos contrarrestar los malos ejemplos que se les muestra a diario por los medios de comunicación masiva. Les proponemos fortalecer el sentimiento de solidaridad en los seres humanos; que haya menos personas que sufran el frío; que hayan menos personas que padezcan hambre; que los niños que sufren el dolor de una enfermedad, tengan un poco de alegría y que no haya ancianos que sufran frío, hambre o el dolor de una enfermedad". Con nuestros deseos de un Feliz Año Nuevo, tratemos de realizar algunas, sino todas, las acciones propuestas y que seamos más humanos.
