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Cuartel de los Pumas cementerio de enemigos de los militares
Vladimir Rodr�guez y Juan B.Madrid
Cr�tica en L�nea
Un exmilitar habr�a revelado ante el arzobispo Jos� Dimas Cede�o y monse�or Fernando Torres, el sitio en el cuartel de "Los Pumas" donde se descubrieron los presuntos restos del sacerdote H�ctor Gallego y estar�an de sepultados otros enemigos del r�gimen militar. Dimas Cede�o dijo que hab�an muchas posibilidades e indicios de que el cad�ver sepultado en el antiguo cuartel de la segunda compa��a de infanter�a "Puma", corresponda al del cura desaparecido durante el r�gimen torrijista. El alto prelado neg� que la fuente de la Iglesia fuera el excoronel Nivaldo Madri��n. Jos� Dimas Cede�o revel� que �l fue quien solicit� al Ministerio P�blico, el inicio de las excavaciones. El arzobispo afirm� que la Iglesia cat�lica no guarda ning�n sentimiento de venganza ni odio contra nadie. Dimas Cede�o convers� ayer con Nubia Gallego, hermana de H�ctor, y �sta y los otros miembros de la familia han accedido a sepultarlo en Santa Fe, Veraguas, donde el sacerdote desarroll� su labor a favor de los campesinos. En tanto, trascendi� que el 17 de junio de 1992, Melbourne Walker, uno de los procesados por el caso, en una carta que remiti� al padre Fernando Guardia, revela que el general Manuel Antonio Noriega le asegur� que el Estado Mayor hab�a decidido capturar y deportar a Gallego por comunista y haberse metido con la familia del general Torrijos. Trascendi� que un oficial que posteriormente fue integrante de la escolta de Torrijos era el jefe de Los Pumas de Tocumen, cuando presuntamente se procedi� a enterrarlo en una fosa en el patio de ese cuartel. Mientras, el odont�logo Jos� Jes�s Pinz�n revel� que una pr�tesis dental utilizada por Gallego, podr�a ser la clave para saber si los restos encontrados en Tocumen corresponden a los del sacerdote. Pinz�n atendi� en varias ocasiones a Gallego para hacerle algunas calzas, pero no guarda ning�n tipo de archivo de placas dentales, pero record� que el cura ten�a una pr�tesis en el maxilar inferior que le hab�an confeccionado en Colombia. En tanto, Jacinto Pe�a, �ltima persona en ver con vida al desaparecido padre H�ctor Gallego, dijo que el principal anhelo de los campesinos de Santa Fe es recuperar el cuerpo de �ste, para poder darle cristiana sepultura en esta regi�n del pa�s, ya que era la tierra donde le gustaba estar y donde era muy querido. El abogado Alex Gonz�lez Franco, acusador particular en el caso Gallego, sostuvo que el identificar los restos ser�a la �ltima p�gina para cerrar una triste historia y permitir� que al menos, los campesinos y la familia de H�ctor puedan llevarle una flor a su tumba el d�a del aniversario de su muerte. Al mismo tiempo, el exmilitar Luis Muller pidi� al Ministerio P�blico investigar si en otra de las fosas encontradas en Tocumen, pueda estar sepultado el subteniente Andr�s Fistonich, quien desapareci� el mismo a�o del crimen de Gallego. Fistonich era acusado de tener nexos con la CIA y presuntamente fue asesinado por el G-2 por su presunta vinculaci�n a un complot para asesinar al general Omar Torrijos.
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