Juan Ramón López Caro dio con la tecla del éxito, reanimó a un equipo enfermo en los últimos meses, y con el encomiable trabajo de Sergio Ramos como líder del equipo, el Real Madrid por fin jugó un partido con autoridad y tumbó al Málaga, un rival que nunca perdió la cara al partido.
López Caro, el sustituto de Vanderle Luxemburgo, fue el gran triunfador de la noche. El en el banquillo, y Sergio Ramos en el césped. López Caro promete. Y quiere demostrar en tres semanas que no es ningún meritorio.
El Real Madrid reaccionó. Con criterio. Sergio Ramos anotó el 1-0 y Robinho firmó el 2-0 final.