Dos niños resultaron heridos de balas en Colón la noche del martes, uno de ellos se debate entre la vida y la muerte.
Las víctimas son Yomar Yoliet White, de 7 años, estudiante del Primer Grado en la Escuela Porfirio Meléndez, y Omar Mendoza, de 11.
El niño White está recluido en el Hospital Del Niño, en la ciudad capital, con un tiro en la cabeza. Mendoza fue herido en los glúteos. Todo ocurrió en Calle 9 del Callejón Martínez.
Amalia Santamaría Campbell, abuela de White, dijo que está cansada de las balaceras en ese lugar.
"Mi nieto pudo morir en medio de esa balacera, y nosotros pensábamos que sólo se había golpeado; nos dijeron que tiene una bala en la cabeza".
Yomar participaba de la celebración del Día de las Madres con otros amiguitos, cuando varios sujetos escondidos en los callejones y en la oscuridad salieron a disparar a los que consideran sus enemigos.
Omar Mendoza es otra víctima del tiroteo. Una bala le entró por el glúteo.
Omar también disfrutaba con su madre Osiris, quien sólo se movió por unos minutos cuando empezó el tiroteo.
Omar está recluido en el Hospital Manuel Amador Guerrero, en Colón.
