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La policía intensificó ayer su investigación del asesinato de Joseph Pilger, un sacerdote católico retirado que había sido convicto por delitos sexuales, después que una autopsia determinó que su muerte se debió a múltiples traumas.
El cuerpo de Pilger, de 78 años, fue hallado el viernes de noche por el dueño de la casa que el sacerdote alquilaba en Lexington (Kentucky), y la oficina forense del condado Fayette dictaminó que se trataba de un homicidio.
Hasta ayer la policía no había informado de arrestos en el caso.
Karen Owens, vecina de Pilger, dijo que el hombre "pasaba la mayor parte del tiempo metido en su casa", y notó que el auto del sacerdote no estaba en la residencia.
HABIA CONFESADO SUS DELITOS
En 1995 Pilger se declaró culpable por el abuso sexual de tres hermanos y uno de sus primos entre 1968 y 1969 cuando él era párroco en Morganfield, en el oeste de Kentucky.
Los muchachos, todos menores de 15 años entonces, servían como monaguillos en la parroquia. |
