Todos los años ocurren inundaciones en algún sitio de Panamá, aunque este país no sufra los terribles daños de la naturaleza que se dan en otras naciones. Y todos los años las autoridades encargadas de actuar en estas situaciones no tienen los recursos necesarios.
Desde la falta de vehículos, personal adiestrado, hasta provisiones para los damnificados, se notan en tales emergencias.
Por suerte la dedicación y la valentía de personal de la Cruz Roja, SINAPROC y otros organismos, evita que sean peores las consecuencias de esos flagelos naturales.
Entonces aparecen los "centros de acopio", para que la comunidad se haga solidaria con la tragedia de sus hermanos y lleve alimentos y comida.
En las últimas inundaciones del frente frío, se notó que muchas personas no recibieron ayuda alimentaria en las primeras horas ni ropa adecuada.
Considero que estas organizaciones deben estar preparadas debidamente para esas urgencias, meses antes.
Por eso, deberían contar con suficiente cantidad de alimentos y ropa para los damnificados. No es cuestión de andar pidiendo la ayuda de la comunidad en el momento de ocurrir la tragedia.
Se deben tener almacenados bultos con alimentos secos de larga duración, frazadas, ropa y agua embotellada.
Además, tener planes diferentes para realizar en un momento dado, para que no haya improvisaciones efectivas.
Sería conveniente que se dieran cursillos de cómo actuar en situaciones difíciles, en aquellos poblados cercanos a ríos y playas. Se sabe están expuestos a peligros naturales.
De esa manera se contaría con elementos de la misma comunidad para orientar a la población en la crisis.
No habría necesidad de solicitar voluntarios "que sepan nadar" en plena crisis.
Aunque Panamá no sufra grandes desastres naturales, como ya lo dije al comienzo, todos los años suceden algunas calamidades que no deben encontrar a las autoridades poco preparadas.
Las primeras horas que padecen los damnificados son las más difíciles. Por eso debe actuarse con rapidez.
Saber que hubo comunidades que recibieron ayuda luego de uno o dos días, es lamentable.
Con estar preparados para estos acontecimientos a tiempo, estoy seguro que los organismos de ayuda actuarían más rápido y mejor.
