El Ejército israelí fue puesto en estado de alerta en la frontera con Líbano por orden del ministro de Defensa, Amir Peretz, por si activistas del Partido de Dios (Hizbulá) se manifiestan debido a la crisis política en Beirut.
Peretz, informa la radio pública, también ordenó a los servicios secretos seguir de cerca esa crisis, cuyas consecuencias, en caso de caer el Gobierno del primer ministro libanés, Fuad Siniora, pueden afectar a Israel.
La milicia de Hizbulá, Partido islámico en la oposición, se vio obligada a alejarse de la frontera con Israel tras la ofensiva militar de este país, en julio pasado.
Si cayese el Gobierno libanés, se cree en medios militares de Israel, los milicianos podrían volver a imponer su presencia en el sur, a lo largo de la frontera.