Las lluvias siguieron llevándose vidas ayer en Chiriquí. La tierra saturada de agua cedió en un barranco de la comunidad de Puerto Balsa y el deslizamiento cubrió a tres hermanos menores de edad mientras dormían. Solo uno pudo sobrevivir.
Bryan Arujo Tello de nueve años y Leonardo Araujo Tello de 10 años se asfixiaron bajo el peso del derrumbe. El mayor de ellos, Christopher Araujo Tello de 15 años, se salvó porque el alud no lo cubrió totalmente.
En Chiriquí, Bocas del Toro y otros sectores afectados por una semana de lluvias e inundaciones, persisten las dificultades para la llegada de ayuda humanitaria.