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Uruguay vuelve a la calma con veda electoral
Agencias
Internacionales
Uruguay dejó atrás el viernes una áspera campaña por la presidencia entre el izquierdista Tabaré Vázquez y el oficialista Jorge Batlle, quienes llegarán a las elecciones del domingo empatados, según las encuestas. Esta será la primera vez que la izquierda tendrá claras posibilidades de llegar al gobierno del país, históricamente dominado por los partidos tradicionales Colorado, de Batlle, y Nacional (Blanco), ambos de centroderecha. La veda electoral que comenzó en la medianoche del jueves silenció a los candidatos, que ese día multiplicaron sus esfuerzos a través de los medios de prensa y de una guerra de avisos publicitarios, pero sin actos callejeros. Vázquez triunfó por la alianza Encuentro Progresista (EP) en la primera ronda el 31 de octubre con un 39 por ciento de los votos, insuficientes para ganar la presidencia debido a que una reforma constitucional impuso en 1996 la exigencia de mayoría absoluta. De esta forma, debió a pasar a una segunda ronda con Batlle, quien obtuvo un 31,7 por ciento de los votos.El Partido Nacional (Blanco), liderado por el ex presidente y derrotado candidato Luis Lacalle, obtuvo un 21,5 por ciento. "Esta fuerza política ya ganó, cambió la historia del país", dijo Vázquez en una entrevista con un programa de televisión en la noche del jueves, en su última aparición pública en procura de captar votos. El oncólogo de 59 años y quien dice que llegó por casualidad a la política, concentra las esperanzas de quienes quieren cambiar la tradicional hegemonía de colorados y blancos, aun con la duda de si la inexperta izquierda podrá hacer un buen gobierno. "En síntesis, voto a Tabaré porque tuvimos ya 15 años el mismo sistema y es hora de cambiar", dijo a Reuters Manuel, de unos 40 años, quien trabaja de cuidacoches, una tarea que se multiplicó en una capital uruguaya que vio crecer el número de automóviles pero no los empleos. Cuando Uruguay volvió a la democracia en 1985 tras 12 años de dictadura militar, el actual presidente colorado Julio Sanguinetti cumplió su primer mandato.El blanco Lacalle gobernó entre 1990 y 1995. Tabaré, como lo llaman a secas sus adherentes, centró su campaña en el desempleo que se estancó este año en 11 por ciento tras los efectos de la devaluación en Brasil y en prometer que si llega a la presidencia, pondrá en marcha un plan de emergencia para terminar con la pobreza. Pero sus promesas parecieron no convencer a sectores ajenos a los que ya lo apoyaron, temerosos de la inexperiencia de Vázquez y la heterogeneidad del Frente Amplio, su coalición de grupos que van de izquierda radical a moderados y que domina el EP. Además Batlle logró un acuerdo con el Partido Blanco para lograr su apoyo y descontó rápidamente la ventaja que le llevaba Vázquez, para llegar igualados el domingo en las intenciones de voto, según diversas encuestas de opinión. Batlle, un veterano senador de 72 años, cerró su campaña con un mensaje transmitido en los tres canales de televisión abierta centrado en la necesidad de que Uruguay busque nuevos mercados para colocar su oferta exportable, principalmente agropecuaria. "Este país produce bien, alimentos sanos y puede producir el doble", dijo Batlle, añadiendo que los países agropecuarios del grupo Cairns deben dar una dura batalla en la Ronda del Milenio, de liberalización comercial, para romper el proteccionismo europeo que asegura daña las economías del grupo.
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"Este país produce bien, alimentos sanos y puede producir el doble", dijo Batlle, añadiendo que los países agropecuarios del grupo Cairns deben dar una dura batalla en la Ronda del Milenio, de liberalización comercial, para romper el proteccionismo europeo que asegura daña las economías del grupo.
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