Si en el mundo de la hípica hay alguien que vive y disfruta cada momento, ese es Dilio Dubet Long Correa, el jinete más antiguo en el Hipódromo Presidente Remón.
A sus 63 años, Dilio Long, como todo el mundo lo llama en el Hipódromo Presidente Remón, se siente tan fuerte como un roble y asegura que su filosofía de vida es que las cosas se hacen bien, o no se hacen.
Ha sido maestro de muchos de los grandes como Sebastián Madrid, Guillermo Espino, David Flores (México), Solís, Berrío, Laffit Pincay, entre otros.
"Una vez le di un caballo a Pincay, para que se le quitara las ganas de montar y yo decía: Si este caballo lo tumba, este muchacho no va a querer venir más al hipódromo; y el caballo se portó de lo mejor, así es la vida; el nació para esto", comenta Dilio Long.
En cuanto a su mayor reto en la hípica, asegura que ha sido llegar a triunfar entre los mejores.
"Siempre he dicho que si estoy en algo debo estar entre los mejores, sino, tengo que salir de allí. Muchos dicen que soy voluble, pero no es así, un compromiso es un compromiso, la disciplina ante todo".
Dilio se define como una persona recta, que no aplaude tonterías. No hay tiempo para los relajos y menos en esta profesión, porque una milésima de segundo, arriba o abajo con los caballos, te puede costar la vida, asegura el maestro Long.
LA HIPICA
Recuerda que estaba en el Instituto Nacional en donde se gradúo de primer ciclo y allí conoció al doctor "Tito"Cowen, por medio de él se contactó con Prudencio Pinillo Pérez, quien era preparador en ese entonces en el hipódromo.
Pinillo Pérez le da la oportunidad de montar un caballo en el establo y el animal, para mala suerte, se asustó y él lo quiso trincar como los del campo y el caballo le cayó encima y le destrozó un pie, esa fue su primera experiencia, muchos pensaron que me iba asustar y desistir de esta carrera, pero aquí estoy, comentó Long.
Estudió hasta tercer año de veterinaria en México y por algunos inconvenientes tuvo que abandonar la carrera. "Siempre me ha gustado la Medicina, pero la hípica es mi gran pasión".
TRAYECTORIA
Dilio Long ya tiene 48 años de dedicarse a esta carrera y la cuenta ya la ha perdido, sin embargo, recuerda que hasta 1985 llevaba más de 800 carreras realizadas y 25 clásicos ganados.
Países como Estados Unidos, México, Canadá, Puerto Rico, Trinidad y Tobago, Colombia, forman parte de la gran lista en donde este maestro de la hípica ha corrido.
ENSEÑANZAS
Para Didio Long todo jinete debe aprender a perder, porque cuando esto pasa, se puede decir que aprendiste.
Cuando tú ganas, todo es bonito y qué pasa cuando pierdes, debes buscar las causas de esa pérdida, en dónde está la falla.
Para ser jinete debes ser una persona responsable, con iniciativa, saber tomar decisiones. Siempre he pensado que el dueño del caballo es el jinete, porque cuando suena el timbre, el único que queda con el caballo, del equipo que se formó, es el jinete.
El amor y conexión con el animal es muy importante, debes darle confianza para que en la pista sean la química perfecta, comenta el veterano.
CONDICIONES FISICAS
Dilio Long que acostumbra a caminar desde su residencia en Concepción, Juan Díaz, hasta el hipódromo; corre, trata de llevar una dieta saludable y lo más importante: eliminar los vicios y sobre todo dormir suficiente; el que duerme, amanece bien.
La hípica no tiene edad; es algo espiritual, sólo Dios y el tiempo me dirán hasta cuándo pueda correr.
META
Le gustaría seguir corriendo unos tres años más para llegar a ser el corredor más viejo a nivel mundial, me gustaría retirarme ganando. "He sido galopador, secretario, herrero, domador, jinete, preparador.. Mi sueño siempre ha sido criar un caballo en mi finca, entrenarlo, correrlo y ganar, y de ésta forma retirarme", manifestó Dilio Long.