Las quejas disciplinarias presentadas contra el entonces Fiscal Segundo de Drogas, Rosendo Miranda Sánchez "no son producto de persecuciones ni de la Procuraduría General de la Nación ni de nosotros los abogados".
Así lo dejaron entrever los abogados Froilán Hormechea y José Ramiro Fonseca Palacios, defensores del colombiano John Brayan Buitrago, preso en La Joyita, por delitos contra la salud pública.
Las quejas son "producto de las actuaciones arbitrarias y dolosas del fiscal de drogas", indicó Fonseca Palacios.
"John Brayan Buitrago no es ningún narcotraficante ni tampoco es ningún asesino", indicó el letrado.
Fonseca reiteró una vez más que Miranda no sólo vendió semovientes, o sea vacas, sin autorización judicial, la que consta en un declaración del Juez XIV Secundino Mendieta, que no lo autorizó.
Pero el jurista no sólo criticó a Miranda por las benditas vacas, sino que este también fue blanco por el lío del Barco Olga Yesenia, para que este fuera administrado por otra persona llamado Marcial González.
"El supuesto depositario judicial hizo inversiones por 53 mil balboas", precisó José Ramiro Fonseca Palacios.
Miranda no tenía permiso para esta clase de acciones, tanto de vacas como las naves.