Un sargento primero de la Policía Nacional fue asesinado la tarde de ayer, lunes, en Don Bosco.
El uniformado recibió tres balazos por parte de criminales que dispararon desde un vehículo en marcha cuando se encontraba realizando trabajos de construcción en la barriada Los Caobos, en Don Bosco, corregimiento de Juan Díaz.
El ataque se registró aproximadamente a las 2: 30 de la tarde.
LA TRAGEDIA
Carlos Alberto Mosquera, de 43 años, se ganaba un "camarón" (trabajo informal) a pocos metros de su vivienda, cuando inesperadamente fue impactado por sujetos que se transportaban en un auto. En el sitio, dos más fueron heridos.
Mosquera recibió tres balazos: uno en cada costado y otro en el brazo izquierdo. Fue llevado por vecinos al Cuarto de Urgencias a la Policlínica JJ Vallarino, en Juan Díaz, en un vehículo particular junto a Alejandro Moreno Camarena, de 56 años, quien estaba en el sitio al momento del ataque y recibió un tiro en el abdomen. A Mosquera se le dictaminó la muerte 20 minutos después de llegar al centro médico.
Otro de los heridos es Reynaldo Arcia, alias "Petrochelli", quien recibió un tiro en la pierna. Se conoció que él se presentó por sus propios medios al Hospital Santo Tomás. Ahí fue detenido de inmediato por su presunta relación en el asesinato del sargento. Otro sujeto fue detenido en el lugar de los hechos.
INVESTIGACIONES
La Policía Nacional, mediante comunicado de prensa, informó que el sargento Carlos Alberto Mosquera enfrentó a los antisociales que intentaron asaltar una planilla a un local donde se registró el suceso. Sin embargo, fuentes policiales afirmaron que la unidad policial fue una víctima inocente cuando los delincuentes tenían como blanco asesinar a un sujeto que había salido recientemente de la cárcel, en venganza por una balacera que se había registrado recientemente.
LA VICTIMA
Ayer, Mosquera se encontraba en su día libre. Laboraba en la Subestación de San Felipe. Era policía desde hacía 20 años. La unidad policial dejó a 3 menores en la orfandad.
Paradójicamente, horas antes el Gobierno había realizado una ceremonia en homenaje a las unidades caídas en ejercicio. Los delincuentes en este país actúan sin medir bien sus blancos.